jueves, 26 de marzo de 2015

26 DE MARZO DE 1892 MUERE

WALT WHITMAN

(West Hills, EE UU, 1819 - Camden, id., 1892) Poeta estadounidense. Hijo de madre holandesa y padre británico, fue el segundo de los nueve vástagos de una familia con escasos recursos económicos. Pasó sólo ocasionalmente por la escuela y pronto tuvo que empezar a trabajar, primero, y a pesar de su escasa formación académica, como maestro itinerante, y más tarde en una imprenta.
Allí se despertó su afición por el periodismo, interés que le llevó a trabajar en varios diarios y revistas neoyorquinos. Nombrado director del Brooklyn Eagle en 1846, permaneció en el cargo sólo dos años debido a su disconformidad con la línea abiertamente proesclavista defendida por el periódico. Su afición por la ópera (género que influyó enormemente en su obra poética) le permitió coincidir en una noche de estreno con un dirigente del periódico de Nueva Orleans Crescent, quien lo convenció para que dejara Nueva York y aceptase una oferta para trabajar en el diario.
Durante el viaje hacia al Sur, que emprendió en 1848, tuvo la oportunidad de contemplar una realidad, la de provincias, para él totalmente desconocida y que, en definitiva, sería decisiva para su carrera futura. Por todo este conjunto de experiencias, cuando regresó a Nueva York, unos meses después, abandonó el periodismo y se entregó por completo a la escritura.
La primera edición de su gran obra, sin embargo, no vio la luz hasta 1855. Esta primera edición de Hojas de hierba (Leaves of grass) (habría otras ocho en vida del poeta) constaba de doce poemas, todos ellos sin título, y fue el propio Whitman quien se encargó de editarla y de llevarla a la imprenta. De los mil ejemplares de la tirada, Whitman vendió pocos y regaló la mayoría, uno de ellos a Ralph Waldo Emerson, importante figura de la escena literaria estadounidense y su primer admirador. Su crítica, muy positiva, motivó a Whitman para seguir escribiendo, a pesar de su ruinosa situación económica y de la nula repercusión que, en general, habían tenido sus poemas.
Al año siguiente apareció la segunda edición y, cuatro años más tarde, la tercera, que amplió con un poema de presentación y otro de despedida. La noticia de que su hermano George había sido herido, al comienzo de la Guerra Civil, le impulsó a abandonar Nueva York para ir a verle a Fredericksburg. Más tarde se trasladó a Washington D.C. donde, apesadumbrado por el sufrimiento de los soldados heridos, trabajó voluntariamente como ayudante de enfermería. Tras el fin de la contienda, se estableció en Washington, donde trabajó para la Administración. Allí publicó varios ensayos de contenido político, en los cuales defendía los ideales democráticos, pero rechazaba el materialismo que, a su juicio, impregnaba la vida y las aspiraciones de la sociedad estadounidense.
Aquejado de varias enfermedades, en 1873 se vio obligado a abandonar Washington y trasladarse a Camden, en Nueva Jersey, donde permaneció hasta su muerte. Dedicó los últimos años de su vida a revisar su obra poética, y a escribir nuevos poemas que fue incluyendo en las sucesivas ediciones de Hojas de hierba.
Whitman fue el primer poeta que experimentó las posibilidades del verso libre, sirviéndose para ello de un lenguaje sencillo y cercano a la prosa, a la vez que creaba una nueva mitología para la joven nación estadounidense, según los postulados del americanismo emergente. El individualismo, los relatos de sus propias experiencias, un tratamiento revolucionario del impulso erótico y la creencia en los valores universales de la democracia son los rasgos novedosos de su poética; en línea con el romanticismo del momento, propuso en su poesía una comunión entre los hombres y la naturaleza de signo cercano al panteísmo. Tanto por sus temas como por la forma, la poesía de Whitman se alejaba de todo cuanto se entendía habitualmente por poético, aunque supo crear con los nuevos materiales momentos de hondo lirismo.

26 DE MARZO NACE:
ERICA JONG

(Nueva York, 1942) Escritora estadounidense. Hija de judíos escapados de Rusia, su madre, pintora de profesión, le inculcó a ella y a sus hermanas el feminismo. Se graduó en el exclusivo Barnard College y posteriormente obtuvo el doctorado en Literatura inglesa del XVIII en la Universidad de Columbia (Nueva York). Fue miembro del Departamento de Inglés de la Universidad de la Ciudad de Nueva York, en los períodos 1964-65 y 1969-70.

Erica Jong en una imagen de 1986

Cultivó todos los géneros, desde la poesía y el ensayo hasta novela. Entre los libros de poemas que ha publicado destacan Friuts and Vegetables ( 1971); Half-Lives (1973), At the Edge of the Body (1979) y Ordinary Miracles (1983). Pero fue la novela Miedo a volar (1973) la que le dio la fama. En ella trata, en tono picaresco, una serie de experiencias y aventuras sexuales que causaron sensación y escándalo por lo explícito y escasamente convencional del tratamiento del tema. Erica Jong se convirtió en el símbolo de la liberación sexual femenina de los años 70. Traducida a 22 lenguas, la escritora norteamericana llegó a vender 10 millones de ejemplares de la novela.
Posteriormente publicó Loveroot (1975); How to Save Your Own Life (Cómo salvar su propia vida, 1977); Fanny (1980), libro que estuvo en la lista de los best-sellers durante más de un año; Sereníssima; Paracaídas y besos, y Canción triste de cualquier mujer (1990). En noviembre de 1995 publicó Miedo a los cincuenta. En este último libro, Jong realiza un amplio retrato de la mujer norteamericana cuando se acerca a los cincuenta, a través de su propia biografía. En 1999 salió a la calle Bendita memoria, una saga de cuatro mujeres, bisabuela, abuela, madre e hija, que abarca todo el siglo XX.

26 DE MARZO NACE:

TENNESSEE WILLIAMS

(Thomas Lanier Williams; Columbus, EE UU, 1911 - Nueva York, 1983) Dramaturgo, poeta y novelista estadounidense. Miembro de una familia puritana sureña, desde muy joven sintió vocación por el teatro. Comenzó los estudios superiores en la Universidad de Missouri, que luego continuó en la de San Louis (en el mismo estado), y finalmente se licenció en Filosofía y Letras por la Universidad de Iowa. Años antes había dejado la casa paterna por desavenencias con sus padres, y para sobrevivir había trabajado en los más variados oficios. Fruto de una decepción amorosa, a los once años había empezado a escribir, tomando como modelos a Chéjov, D. H. Lawrence y el poeta simbolista Hart Crane. Se licenció en la Universidad de Iowa en 1940, el mismo año en que estrenó, sin éxito, su primera obra teatral.

Sus primeras piezas fueron interpretadas por un grupo del sur de los Estados Unidos con el que colaboró y con el que coincidía en su apreciación de que "el arte es una forma de anarquía y el teatro una forma de arte". Vivió la bohemia de Nueva Orleans, hasta que, movido por un sentimiento de culpabilidad hacia su hermana, que había sufrido una lobotomía, escribió el que sería su primer gran éxito teatral, El zoo de cristal (1944), inicio de una ferviente producción que lo consolidaría como el más importante dramaturgo estadounidense de su tiempo.
Sus personajes se hallan frecuentemente enfrentados con la sociedad y se debaten entre conflictos de gran intensidad, en los que terminan por aflorar las pasiones y culpas en su forma original, ajena a los convencionalismos sociales. La intriga es escasa en sus obras, que se centran en la expresión desgarrada de los personajes, inmersos en un ambiente opresivo, y cuyos diálogos transmiten poesía y sensualidad.
El Sur natal proporciona a Tennessee Williams el escenario más frecuente para sus creaciones, como en su famosa pieza La gata sobre el tejado de cinc (1955), que sería llevada al cine en varias ocasiones (la primera en 1958, por R. Brooks). Sus obras alcanzaron durante los años cincuenta un renombre internacional, sobre todo Un tranvía llamado Deseo (1947), que le valió el Premio Pulitzer y también sería llevada a la pantalla (en 1952, por Elia Kazan).
Casi todas las obras de esos años fueron llevadas al cine, con guiones del mismo Tennessee Williams en la mayoría de los casos, y sus versiones obtuvieron, igualmente, un gran reconocimiento. Tennessee Williams es, seguramente, el dramaturgo del que más piezas se han visto en la pantalla, y esto se debe a que las características por las que tantos triunfos cosecharon en el teatro las hacen sumamente aptas para ser trasladadas al celuloide: la intensidad dramática, el dinamismo de la acción, los diálogos fluidos, la hondura psicológica de los personajes (sobre todo los femeninos) y su profundo lirismo, que son los puntales en los que se apoya el autor para analizar la violencia primitiva que subyace en la civilización norteamericana.
Sin embargo, tras esta etapa dorada siguió una época dura para Williams, víctima de calmantes y drogas, solo y abrumado por las críticas adversas, en la que no consiguió escribir más que algunas piezas menores. En 1967 publicó el libro de poemas In the winter of cities y en 1975 sus Memorias, que resultan muy interesantes para conocer el panorama del teatro norteamericano contemporáneo. Murió solo en una habitación de hotel, tras ingerir un tubo de pastillas contra el insomnio. A lo largo de su vida recibió diversos premios, entre ellos dos veces el Pulitzer por Un tranvía llamado Deseo y La gata sobre el tejado de cinc.

miércoles, 25 de marzo de 2015

ZULEMA MORET

Cazadora de sueños (I)

que dejara de soñar/ me dijo/
que basta de andar pintándolas/
a ellas/ mujeres solas/ detrás
de niños solos/ con madres muertas/
por campos tristes/
qué es esta subversión de estilo/ me
increpó/ esta inversión de la letra/
reclamó a los gritos / basta de metáforas/
a la edad/ de andar derecha/
basta de indagar las claves / entre
cifras inclementes/ porcentajes/
que si insistes / te llegarrá el castigo/
amenazó/ tarde o temprano/
te cortarán las alas

Jaime Sabines

¡Qué risueño contacto!

¡Qué risueño contacto el de tus ojos,
ligeros como palomas asustadas a la orilla
del agua!
!Qué rápido contacto el de tus ojos
con mi mirada!

¿Quién eres tú? !Qué importa!
A pesar de ti misma,
hay en tus ojos una breve palabra
enigmática.
No quiero saberla. Me gustas
mirándome de lado, escondida, asustada.
Así puedo pensar que huyes de algo,
de mí o de ti, de nada,
de esas tentaciones que dicen que persiguen
a la mujer casada.

25 DE MARZO NACE JAIME SABINES

25 DE MARZO NACE
JAIME SABINES

Poeta mexicano, nacido en Tuxtla Gutiérrez (Chiapas) en 1926 y fallecido en Ciudad de México en 1999.

Antes de dedicarse al estudio de las letras, cursó tres años de la carrera de Medicina. Se licenció en Lengua y Literatura españolas por la Universidad Nacional Autónoma de México e hizo estudios de posgrado en la misma institución. Después de vivir en la ciudad de México durante el período de su formación académica, regresó a Chiapas para dedicarse a la actividad comercial entre 1952 y 1959.

Fue becario especial del Centro Mexicano de Escritores de 1964 a 1965 y en este último año formó parte del jurado del premio Casa de las Américas. Además de la actividad literaria, realizó algunas incursiones en el ámbito político al ser diputado federal por Chiapas de 1976 a 1979 y por el Distrito Federal en 1988.

Los títulos de algunas de sus obras son: Horal (1950), La señal (1951), Adán y Eva (1952), Tarumba (1956), Diario semanario y poemas en prosa (1961), Poemas sueltos (1962), Yuria (1967), Maltiempo (1972), Algo sobre la muerte del mayor Sabines (1973), Otros poemas sueltos (1973-1977) y Recuento de poemas (tercera edición en 1987, recopilación de su obra).

En la temática de su poesía destacan el amor y la muerte, la desolación y un sentimiento de inadaptación ante la realidad burguesa y hostil. Su obra refleja la vida cotidiana, la soledad y la angustia del hombre. Emplea un lenguaje coloquial teñido, en ocasiones, de un carácter irónico. Su poesía ha sido traducida a una docena de lenguas. Grabó un disco para la serie Voz viva de México, de la UNAM.

Entre los premios y distinciones que recibió destacan el Premio Chiapas (1959), el Premio Xavier Villaurrutia (1972), por el conjunto de su obra; el Premio Elías Sourasky (1982) y el Nacional de Letras (1983).

GERLILIBROS: FRANCISCO URONDOLa verdad es la única realidad...

GERLILIBROS: FRANCISCO URONDO La verdad es la única realidad ...: FRANCISCO URONDO La verdad es la única realidad Del otro lado de la reja está la realidad, de este lado de la reja también está la rea...
CARTA ABIERTA A LA JUNTA MILITAR
RODOLFO WALSH*
1. La censura de prensa, la persecución a intelectuales, el allanamiento de mi casa en el Tigre, el asesinato de amigos queridos y la pérdida de una hija que murió combatiéndolos, son algunos de los hechos que me obligan a esta forma de expresión clandestina después de haber opinado libremente como escritor y periodista durante casi treinta años.
El primer aniversario de esta Junta Militar ha motivado un balance de la acción de gobierno en documentos y discursos oficiales, donde lo que ustedes llaman aciertos son errores, los que reconocen como errores son crímenes y lo que omiten son calamidades.

El 24 de marzo de 1976 derrocaron ustedes a un gobierno del que formaban parte, a cuyo desprestigio contribuyeron como ejecutores de su política represiva, y cuyo término estaba señalado por elecciones convocadas para nueve meses más tarde. En esa perspectiva lo que ustedes liquidaron no fue el mandato transitorio de Isabel Martínez sino la posibilidad de un proceso democrático donde el pueblo remediara males que ustedes continuaron y agravaron.

Ilegítimo en su origen, el gobierno que ustedes ejercen pudo legitimarse en los hechos recuperando el programa en que coincidieron en las elecciones de 1973 el ochenta por ciento de los argentinos y que sigue en pie como expresión objetiva de la voluntad del pueblo, único significado posible de ese "ser nacional" que ustedes invocan tan a menudo.

Invirtiendo ese camino han restaurado ustedes la corriente de ideas e intereses de minorías derrotadas que traban el desarrollo de las fuerzas productivas, explotan al pueblo y disgregan la Nación. Una política semejante sólo puede imponerse transitoriamente prohibiendo los partidos, interviniendo los sindicatos, amordazando la prensa e implantando el terror más profundo que ha conocido la sociedad argentina.

2. Quince mil desaparecidos, diez mil presos, cuatro mil muertos, decenas de miles de desterrados son la cifra desnuda de ese terror.

Colmadas las cárceles ordinarias, crearon ustedes en las principales guarniciones del país virtuales campos de concentración donde no entra ningún juez, abogado, periodista, observador internacional. El secreto militar de los procedimientos, invocado como necesidad de la investigación, convierte a la mayoría de las detenciones en secuestros que permiten la tortura sin límite y el fusilamiento sin juicio.1

Más de siete mil recursos de hábeas corpus han sido contestados negativamente este último año. En otros miles de casos de desaparición el recurso ni siquiera se ha presentado porque se conoce de antemano su inutilidad o porque no se encuentra abogado que ose presentarlo después que los cincuenta o sesenta que lo hacían fueron a su turno secuestrados.

De este modo han despojado ustedes a la tortura de su límite en el tiempo. Como el detenido no existe, no hay posibilidad de presentarlo al juez en diez días según manda una ley que fue respetada aún en las cumbres represivas de anteriores dictaduras.

La falta de límite en el tiempo ha sido complementada con la falta de límite en los métodos, retrocediendo a épocas en que se operó directamente sobre las articulaciones y las vísceras de las víctimas, ahora con auxiliares quirúrgicos y farmacológicos de que no dispusieron los antiguos verdugos. El potro, el torno, el despellejamiento en vida, la sierra de los inquisidores medievales reaparecen en los testimonios junto con la picana y el "submarino", el soplete de las actualizaciones contemporáneas.2

Mediante sucesivas concesiones al supuesto de que el fin de exterminar a la guerrilla justifica todos los medios que usan, han llegado ustedes a la tortura absoluta, intemporal, metafísica en la medida que el fin original de obtener información se extravía en las mentes perturbadas que la administran para ceder al impulso de machacar la sustancia humana hasta quebrarla y hacerle perder la dignidad que perdió el verdugo, que ustedes mismos han perdido.

3. La negativa de esa Junta a publicar los nombres de los prisioneros es asimismo la cobertura de una sistemática ejecución de rehenes en lugares descampados y horas de la madrugada con el pretexto de fraguados combates e imaginarias tentativas de fuga.

Extremistas que panfletean el campo, pintan acequias o se amontonan de a diez en vehículos que se incendian son los estereotipos de un libreto que no está hecho para ser creído sino para burlar la reacción internacional ante ejecuciones en regla mientras en lo interno se subraya el carácter de represalias desatadas en los mismos lugares y en fecha inmediata a las acciones guerrilleras.

Setenta fusilados tras la bomba en Seguridad Federal, 55 en respuesta a la voladura del Departamento de Policía de La Plata, 30 por el atentado en el Ministerio de Defensa, 40 en la Masacre del Año Nuevo que siguió a la muerte del coronel Castellanos, 19 tras la explosión que destruyó la comisaría de Ciudadela forman parte de 1.200 ejecuciones en 300 supuestos combates donde el oponente no tuvo heridos y las fuerzas a su mando no tuvieron muertos.

Depositarios de una culpa colectiva abolida en las normas civilizadas de justicia, incapaces de influir en la política que dicta los hechos por los cuales son represaliados, muchos de esos rehenes son delegados sindicales, intelectuales, familiares de guerrilleros, opositores no armados, simples sospechosos a los que se mata para equilibrar la balanza de las bajas según la doctrina extranjera de "cuenta-cadáveres" que usaron los SS en los países ocupados y los invasores en Vietnam.

El remate de guerrilleros heridos o capturados en combates reales es asimismo una evidencia que surge de los comunicados militares que en un año atribuyeron a la guerrilla 600 muertos y sólo 10 ó 15 heridos, proporción desconocida en los más encarnizados conflictos. Esta impresión es confirmada por un muestreo periodístico de circulación clandestina que revela que entre el 18 de diciembre de 1976 y el 3 de febrero de 1977, en 40 acciones reales, las fuerzas legales tuvieron 23 muertos y 40 heridos, y la guerrilla 63 muertos.3

Más de cien procesados han sido igualmente abatidos en tentativas de fuga cuyo relato oficial tampoco está destinado a que alguien lo crea sino a prevenir a la guerrilla y los partidos de que aún los presos reconocidos son la reserva estratégica de las represalias de que disponen los Comandantes de Cuerpo según la marcha de los combates, la conveniencia didáctica o el humor del momento.

Así ha ganado sus laureles el general Benjamín Menéndez, jefe del Tercer Cuerpo de Ejército, antes del 24 de marzo con el asesinato de Marcos Osatinsky, detenido en Córdoba, después con la muerte de Hugo Vaca Narvaja y otros cincuenta prisioneros en variadas aplicaciones de la ley de fuga ejecutadas sin piedad y narradas sin pudor.4

El asesinato de Dardo Cabo, detenido en abril de 1975, fusilado el 6 de enero de 1977 con otros siete prisioneros en jurisdicción del Primer Cuerpo de Ejército que manda el general Suárez Masson, revela que estos episodios no son desbordes de algunos centuriones alucinados sino la política misma que ustedes planifican en sus estados mayores, discuten en sus reuniones de gabinete, imponen como comandantes en jefe de las 3 Armas y aprueban como miembros de la Junta de Gobierno.

4. Entre mil quinientas y tres mil personas han sido masacradas en secreto después que ustedes prohibieron informar sobre hallazgos de cadáveres que en algunos casos han trascendido, sin embargo, por afectar a otros países, por su magnitud genocida o por el espanto provocado entre sus propias fuerzas.5

Veinticinco cuerpos mutilados afloraron entre marzo y octubre de 1976 en las costas uruguayas, pequeña parte quizás del cargamento de torturados hasta la muerte en la Escuela de Mecánica de la Armada, fondeados en el Río de la Plata por buques de esa fuerza, incluyendo el chico de 15 años, Floreal Avellaneda, atado de pies y manos, "con lastimaduras en la región anal y fracturas visibles" según su autopsia.

Un verdadero cementerio lacustre descubrió en agosto de 1976 un vecino que buceaba en el Lago San Roque de Córdoba, acudió a la comisaría donde no le recibieron la denuncia y escribió a los diarios que no la publicaron.6

Treinta y cuatro cadáveres en Buenos Aires entre el 3 y el 9 de abril de 1976, ocho en San Telmo el 4 de julio, diez en el Río Luján el 9 de octubre, sirven de marco a las masacres del 20 de agosto que apilaron 30 muertos a 15 kilómetros de Campo de Mayo y 17 en Lomas de Zamora.

En esos enunciados se agota la ficción de bandas de derecha, presuntas herederas de las 3 A de López Rega, capaces de atravesar la mayor guarnición del país en camiones militares, de alfombrar de muertos el Río de la Plata o de arrojar prisioneros al mar desde los transportes de la Primera Brigada Aérea 7, sin que se enteren el general Videla, el almirante Massera o el brigadier Agosti. Las 3 A son hoy las 3 Armas, y la Junta que ustedes presiden no es el fiel de la balanza entre "violencias de distintos signos" ni el árbitro justo entre "dos terrorismos", sino la fuente misma del terror que ha perdido el rumbo y sólo puede balbucear el discurso de la muerte.8

La misma continuidad histórica liga el asesinato del general Carlos Prats, durante el anterior gobierno, con el secuestro y muerte del general Juan José Torres, Zelmar Michelini, Héctor Gutiérrez Ruiz y decenas de asilados en quienes se ha querido asesinar la posibilidad de procesos democráticos en Chile, Bolivia y Uruguay.9

La segura participación en esos crímenes del Departamento de Asuntos Extranjeros de la Policía Federal, conducido por oficiales becados de la CIA a través de la AID, como los comisarios Juan Gattei y Antonio Gettor, sometidos ellos mismos a la autoridad de Mr. Gardener Hathaway, Station Chief de la CIA en Argentina, es semillero de futuras revelaciones como las que hoy sacuden a la comunidad internacional que no han de agotarse siquiera cuando se esclarezcan el papel de esa agencia y de altos jefes del Ejército, encabezados por el general Menéndez, en la creación de la Logia Libertadores de América, que reemplazó a las 3 A hasta que su papel global fue asumido por esa Junta en nombre de las 3 Armas.

Este cuadro de exterminio no excluye siquiera el arreglo personal de cuentas como el asesinato del capitán Horacio Gándara, quien desde hace una década investigaba los negociados de altos jefes de la Marina, o del periodista de "Prensa Libre" Horacio Novillo, apuñalado y calcinado después que ese diario denunció las conexiones del ministro Martínez de Hoz con monopolios internacionales.

A la luz de estos episodios cobra su significado final la definición de la guerra pronunciada por uno de sus jefes: "La lucha que libramos no reconoce límites morales ni naturales, se realiza más allá del bien y del mal".10

5. Estos hechos, que sacuden la conciencia del mundo civilizado, no son sin embargo los que mayores sufrimientos han traído al pueblo argentino ni las peores violaciones de los derechos humanos en que ustedes incurren. En la política económica de ese gobierno debe buscarse no sólo la explicación de sus crímenes sino una atrocidad mayor que castiga a millones de seres humanos con la miseria planificada.

En un año han reducido ustedes el salario real de los trabajadores al 40%, disminuido su participación en el ingreso nacional al 30%, elevado de 6 a 18 horas la jornada de labor que necesita un obrero para pagar la canasta familiar11, resucitando así formas de trabajo forzado que no persisten ni en los últimos reductos coloniales.

Congelando salarios a culatazos mientras los precios suben en las puntas de las bayonetas, aboliendo toda forma de reclamación colectiva, prohibiendo asambleas y comisiones internas, alargando horarios, elevando la desocupación al récord del 9%12 prometiendo aumentarla con 300.000 nuevos despidos, han retrotraído las relaciones de producción a los comienzos de la era industrial, y cuando los trabajadores han querido protestar los han calificados de subversivos, secuestrando cuerpos enteros de delegados que en algunos casos aparecieron muertos, y en otros no aparecieron.13

Los resultados de esa política han sido fulminantes. En este primer año de gobierno el consumo de alimentos ha disminuido el 40%, el de ropa más del 50%, el de medicinas ha desaparecido prácticamente en las capas populares. Ya hay zonas del Gran Buenos Aires donde la mortalidad infantil supera el 30%, cifra que nos iguala con Rhodesia, Dahomey o las Guayanas; enfermedades como la diarrea estival, las parasitosis y hasta la rabia en que las cifras trepan hacia marcas mundiales o las superan. Como si esas fueran metas deseadas y buscadas, han reducido ustedes el presupuesto de la salud pública a menos de un tercio de los gastos militares, suprimiendo hasta los hospitales gratuitos mientras centenares de médicos, profesionales y técnicos se suman al éxodo provocado por el terror, los bajos sueldos o la "racionalización".

Basta andar unas horas por el Gran Buenos Aires para comprobar la rapidez con que semejante política la convirtió en una villa miseria de diez millones de habitantes. Ciudades a media luz, barrios enteros sin agua porque las industrias monopólicas saquean las napas subterráneas, millares de cuadras convertidas en un solo bache porque ustedes sólo pavimentan los barrios militares y adornan la Plaza de Mayo , el río más grande del mundo contaminado en todas sus playas porque los socios del ministro Martínez de Hoz arrojan en él sus residuos industriales, y la única medida de gobierno que ustedes han tomado es prohibir a la gente que se bañe.

Tampoco en las metas abstractas de la economía, a las que suelen llamar "el país", han sido ustedes más afortunados. Un descenso del producto bruto que orilla el 3%, una deuda exterior que alcanza a 600 dólares por habitante, una inflación anual del 400%, un aumento del circulante que en solo una semana de diciembre llegó al 9%, una baja del 13% en la inversión externa constituyen también marcas mundiales, raro fruto de la fría deliberación y la cruda inepcia.

Mientras todas las funciones creadoras y protectoras del Estado se atrofian hasta disolverse en la pura anemia, una sola crece y se vuelve autónoma. Mil ochocientos millones de dólares que equivalen a la mitad de las exportaciones argentinas presupuestados para Seguridad y Defensa en 1977, cuatro mil nuevas plazas de agentes en la Policía Federal, doce mil en la provincia de Buenos Aires con sueldos que duplican el de un obrero industrial y triplican el de un director de escuela, mientras en secreto se elevan los propios sueldos militares a partir de febrero en un 120%, prueban que no hay congelación ni desocupación en el reino de la tortura y de la muerte, único campo de la actividad argentina donde el producto crece y donde la cotización por guerrillero abatido sube más rápido que el dólar.

6. Dictada por el Fondo Monetario Internacional según una receta que se aplica indistintamente al Zaire o a Chile, a Uruguay o Indonesia, la política económica de esa Junta sólo reconoce como beneficiarios a la vieja oligarquía ganadera, la nueva oligarquía especuladora y un grupo selecto de monopolios internacionales encabezados por la ITT, la Esso, las automotrices, la U.S.Steel, la Siemens, al que están ligados personalmente el ministro Martínez de Hoz y todos los miembros de su gabinete.

Un aumento del 722% en los precios de la producción animal en 1976 define la magnitud de la restauración oligárquica emprendida por Martínez de Hoz en consonancia con el credo de la Sociedad Rural expuesto por su presidente Celedonio Pereda: "Llena de asombro que ciertos grupos pequeños pero activos sigan insistiendo en que los alimentos deben ser baratos".14

El espectáculo de una Bolsa de Comercio donde en una semana ha sido posible para algunos ganar sin trabajar el cien y el doscientos por ciento, donde hay empresas que de la noche a la mañana duplicaron su capital sin producir más que antes, la rueda loca de la especulación en dólares, letras, valores ajustables, la usura simple que ya calcula el interés por hora, son hechos bien curiosos bajo un gobierno que venía a acabar con el "festín de los corruptos".

Desnacionalizando bancos se ponen el ahorro y el crédito nacional en manos de la banca extranjera, indemnizando a la ITT y a la Siemens se premia a empresas que estafaron al Estado, devolviendo las bocas de expendio se aumentan las ganancias de la Shell y la Esso, rebajando los aranceles aduaneros se crean empleos en Hong Kong o Singapur y desocupación en la Argentina. Frente al conjunto de esos hechos cabe preguntarse quiénes son los apátridas de los comunicados oficiales, dónde están los mercenarios al servicio de intereses foráneos, cuál es la ideología que amenaza al ser nacional.

Si una propaganda abrumadora, reflejo deforme de hechos malvados no pretendiera que esa Junta procura la paz, que el general Videla defiende los derechos humanos o que el almirante Massera ama la vida, aún cabría pedir a los señores Comandantes en Jefe de las 3 Armas que meditaran sobre el abismo al que conducen al país tras la ilusión de ganar una guerra que, aún si mataran al último guerrillero, no haría más que empezar bajo nuevas formas, porque las causas que hace más de veinte años mueven la resistencia del pueblo argentino no estarán desaparecidas sino agravadas por el recuerdo del estrago causado y la revelación de las atrocidades cometidas.

Estas son las reflexiones que en el primer aniversario de su infausto gobierno he querido hacer llegar a los miembros de esa Junta, sin esperanza de ser escuchado, con la certeza de ser perseguido, pero fiel al compromiso que asumí hace mucho tiempo de dar testimonio en momentos difíciles.

Rodolfo Walsh. - C.I. 2845022
Buenos Aires, 24 de marzo de 1977



NOTAS

1 Desde enero de 1977 la Junta empezó a publicar nóminas incompletas de nuevos detenidos y de "liberados" que en su mayoría no son tales sino procesados que dejan de estar a su disposición pero siguen presos. Los nombres de millares de prisioneros son aún secreto militar y las condiciones para su tortura y posterior fusilamiento permanecen intactas.

2 El dirigente peronista Jorge Lizaso fue despellejado en vida, el ex diputado radical Mario Amaya muerto a palos, el ex diputado Muñiz Barreto desnucado de un golpe. Testimonio de una sobreviviente: "Picana en los brazos, las manos, los muslos, cerca de la boca cada vez que lloraba o rezaba... Cada veinte minutos abrían la puerta y me decían que me iban a hacer fiambre con la máquina de sierra que se escuchaba".

3 "Cadena Informativa", mensaje Nro. 4, febrero de 1977.

4 Una versión exacta aparece en esta carta de los presos en la Cárcel de Encausados al obispo de Córdoba, monseñor Primatesta: "El 17 de mayo son retirados con el engaño de ir a la enfermería seis compañeros que luego son fusilados. Se trata de Miguel Ángel Mosse, José Svagusa, Diana Fidelman, Luis Verón, Ricardo Yung y Eduardo Hernández, de cuya muerte en un intento de fuga informó el Tercer Cuerpo de Ejército. El 29 de mayo son retirados José Pucheta y Carlos Sgadurra. Este último había sido castigado al punto de que no se podía mantener en pie sufriendo varias fracturas de miembros. Luego aparecen también fusilados en un intento de fuga".

5 En los primeros 15 días de gobierno militar aparecieron 63 cadáveres, según los diarios. Una proyección anual da la cifra de 1500. La presunción de que puede ascender al doble se funda en que desde enero de 1976 la información periodística era incompleta y en el aumento global de la represión después del golpe. Una estimación global verosímil de las muertes producidas por la Junta es la siguiente. Muertos en combate: 600. Fusilados: 1.300. Ejecutados en secreto: 2.000. Varios. 100. Total: 4.000.

6 Carta de Isaías Zanotti, difundida por ANCLA, Agencia Clandestina de Noticias.

7 "Programa" dirigido entre julio y diciembre de 1976 por el brigadier Mariani, jefe de la Primera Brigada Aérea del Palomar. Se usaron transportes Fokker F-27.

8 El canciller vicealmirante Guzzeti en reportaje publicado por "La Opinión" el 3-10-76 admitió que "el terrorismo de derecha no es tal" sino "un anticuerpo".

9 El general Prats, último ministro de Ejército del presidente Allende, muerto por una bomba en setiembre de 1974. Los ex parlamentarios uruguayos Michelini y Gutiérrez Ruiz aparecieron acribillados el 2-5-76. El cadáver del general Torres, ex presidente de Bolivia, apareció el 2-6-76, después que el ministro del Interior y ex jefe de Policía de Isabel Martínez, general Harguindeguy, lo acusó de "simular" su secuestro.

10 Teniente Coronel Hugo Ildebrando Pascarelli según "La Razón" del 12-6-76. Jefe del Grupo I de Artillería de Ciudadela. Pascarelli es el presunto responsable de 33 fusilamientos entre el 5 de enero y el 3 de febrero de 1977.

11 Unión de Bancos Suizos, dato correspondiente a junio de 1976. Después la situación se agravó aún más.

12 Diario "Clarín".

13 Entre los dirigentes nacionales secuestrados se cuentan Mario Aguirre de ATE, Jorge Di Pasquale de Farmacia, Oscar Smith de Luz y Fuerza. Los secuestros y asesinatos de delegados han sido particularmente graves en metalúrgicos y navales.

14 Prensa Libre, 16-12-76.

* El escritor argentino Rodolfo J. Walsh nació en 1927. El 25 de marzo de 1977 un pelotón de la dictadura miliar lo emboscó en Buenos Aires. Su cuerpo nunca apareció. El día anterior había escrito la Carta Abierta a la Junta Militar.
25 MARZO DE 1977
ES ASESINADO POR LA DICTADURA
RODOLFO WALSH

(Choele-Choel, 1927 - Buenos Aires, 1977) Narrador y periodista argentino que destacó como singular cultivador del género policiaco. El caso de Walsh es uno de los más dramáticos de la Argentina de los últimos años: después de editar varias novelas con mucho éxito y algunos escritos con no menor impacto (entre ellos el cuento "Esa mujer"), comenzó a sentir la presión del peso de las responsabilidades, en el orden personal, que le llevaron a adquirir un compromiso con la realidad social de su país y con la devastación de los criterios de convivencia y de solidaridad más elementales.


Criado en un colegio de sacerdotes irlandeses para niños pobres, la infancia de Walsh dejó huellas en su escritura. Ya en Buenos Aires, y luego de trabajar como corrector de pruebas y traductor, publicó Diez cuentos policiales argentinos, Variaciones en rojo (ambas de 1953, la última Premio Municipal de Literatura) y preparó las antologías Diez cuentos policiales argentinos (1953), la primera recopilación de autores nacionales del género, y Antología del cuento extraño (1954).
Escribió además celebradas obras de investigación periodística: Operación Masacre (1957), Quién mató a Rosendo (1969) y El caso Satanowsky (1973). Fue uno de los fundadores de la agencia cubana de noticias Prensa Latina. A su regreso escribió los cuentos de Los oficios terrestres (1965) y Un kilo de oro (1967) y las obras de teatro La granada y La batalla (ambas de 1965). Vinculado al sindicalismo de izquierda, tras el golpe de estado de 1976 hizo pública la "Carta abierta a la Junta Militar". En 1977 fue secuestrado y presumiblemente asesinado, aunque nunca se encontró su cadáver. En 1981 se publicó en México su Obra literaria completa.

La narrativa de Walsh

La obra de Rodolfo Walsh se inició con la publicación de Variaciones en rojo (1953), compuesta por tres relatos de clásico corte policial al estilo anglosajón: enigmas que un detective, en este caso un corrector editorial de pruebas, logra dilucidar a través de inferencias inteligentes, y de datos y detalles desapercibidos para el lector pero reveladores para el detective. En esa línea, ese mismo año compila la antología Diez cuentos policiales argentinos, donde incluye su propio "Cuento para tahúres".
Los acontecimientos que tuvieron lugar entre la caída de Perón y la consolidación del nuevo gobierno modificaron la inicial indiferencia política de Walsh. En efecto, para denunciar el fusilamiento sumario, en 1956, de un grupo de opositores al nuevo régimen en la localidad bonaerense de José León Suárez, escribió en un periódico lo que más tarde, bajo la forma de libro, se publicó con el título de Operación Masacre (1957). Aquí el detective deviene periodista, y el periodista pasa de la investigación del delito individual, del caso policial, a la investigación del crimen social y político. De este modo, y tal vez sin ser del todo consciente de su aporte, Walsh sienta en Argentina un precedente de lo que más tarde se conocerá en Estados Unidos como "novela de no ficción".
En El caso Satanowsky (1958), Walsh dirige su denuncia contra los más altos responsables de la llamada Revolución Libertadora: si antes se centró en los fusilamientos de Suárez, ahora trata de los casos de corrupción, extorsión y asesinato vinculados a la lucha por el poder y la propiedad del diario La Razón de Buenos Aires. Como en un buen relato policial, hay un cadáver, encubridores, cómplices, pistas falsas y la consiguiente investigación. Pero, a diferencia de la ficción del género policial, todo lo que se relata en el libro de Walsh está documentado, es verídico. El arte del autor consiste en volverlo verosímil, a través de los procedimientos propios de la literatura.
La confusa muerte de un líder sindical es reconstruida con los mismos artificios en ¿Quién mató a Rosendo? (1969). Por otra parte, en los volúmenes de relatos Los oficios terrestres (1966) y Un kilo de oro (1967) Walsh demostró un talento singular para la construcción de cuentos de alta perfección formal. "Esa mujer", un cuento cuyo personaje principal es Eva Perón y que pertenece al primero de los volúmenes citados, es uno de los relatos más conocidos y representativos del autor.
En 1974 se rodó la película La Patagonia Rebelde, basada en la novela de un compañero de generación, Osvaldo Bayer; el filme causó un enorme malestar entre los miembros de las fuerzas armadas argentinas de aquellos años. Así las cosas, Walsh resolvió no exiliarse y permanecer en la Argentina hasta que, apenas comenzada la escalada terrorista del golpe militar, fue sacado a la fuerza de su casa y llevado hacia una muerte casi segura. Rodolfo Walsh fue uno de los más de treinta mil desaparecidos durante la dictadura militar de los años 1976-1983. La desaparición de Rodolfo Walsh en 1977, después de haber escrito una "Carta abierta a la Junta Militar", influyó durante años la lectura de su obra. Pero cuando sus textos volvieron a estar libres de prohibiciones y censuras se comprobó que, junto a la figura del militante político, se erigía la de uno de los narradores más sólidos y dotados de la segunda mitad del siglo XX en Argentina.

martes, 24 de marzo de 2015

CESAR VALLEJO

MASA

Al fin de la batalla,
y muerto el combatiente, vino hacia él un hombre
y le dijo: "No mueras, te amo tanto!"
Pero el cadáver ¡ay! siguió muriendo.
Se le acercaron dos y repitiéronle:
"No nos dejes! ¡Valor! ¡Vuelve a la vida!"
Pero el cadáver ¡ay! siguió muriendo.
Acudieron a él veinte, cien, mil, quinientos mil,
clamando: "Tanto amor y no poder nada contra la muerte!"
Pero el cadáver ¡ay! siguió muriendo.
Le rodearon millones de individuos,
con un ruego común: "¡Quédate hermano!"
Pero el cadáver ¡ay! siguió muriendo.
Entonces, todos los hombres de la tierra
le rodearon; les vio el cadáver triste, emocionado;
incorporóse lentamente,
abrazó al primer hombre; echóse a andar.

FRANCISCO URONDO

La verdad es la única realidad

Del otro lado de la reja está la realidad, de
este lado de la reja también está
la realidad; la única irreal
es la reja; la libertad es real aunque no se sabe bien
si pertenece al mundo de los vivos, al
mundo de los muertos, al mundo de las
fantasías o al mundo de la vigilia, al de la explotación o de la producción.
Los sueños, sueños son; recuerdos, aquel
cuerpo, ese vaso de vino, el amor y
las flaquezas del amor, por supuesto, forman
parte de la realidad; un disparo en
la noche, en la frente de estos hermanos, de estos hijos, aquellos
gritos irreales de dolor real de los torturados en
el angelus eterno y siniestro en una brigada de policía
cualquiera
son parte de la memoria, no suponen necesariamente el presente, pero
pertenecen a la realidad. La única aparente
es la reja cuadriculando el cielo, el canto
perdido de un preso, ladrón o combatiente, la voz
fusilada, resucitada al tercer día en un vuelo inmenso cubriendo la Patagonia
porque las
masacres, las redenciones, pertenecen a la realidad como
la esperanza recatada de la pólvora, de la inocencia
estival: son la realidad, como el coraje y la convalecencia
del miedo, ese aire que se resiste a volver después del peligro
como los designios de todo un pueblo que marcha hacia la victoria
o hacia la muerte, que tropieza, que aprende a defenderse, a rescatar
lo suyo, su
realidad.
Aunque parezca a veces una mentira, la única
mentira no es siquiera la traición, es
simplemente una reja que no pertenece a la realidad.


Cárcel de Villa Devoto, abril de 1973

JUAN GELMAN

Oración de un desocupado

Padre,
desde los cielos bájate, he olvidado
las oraciones que me enseñó la abuela,
pobrecita, ella reposa ahora,
no tiene que lavar, limpiar, no tiene
que preocuparse andando el día por la ropa,
no tiene que velar la noche, pena y pena,
rezar, pedirte cosas, rezongarte dulcemente.

Desde los cielos bájate, si estás, bájate entonces,
que me muero de hambre en esta esquina,
que no sé de qué sirve haber nacido,
que me miro las manos rechazadas,
que no hay trabajo, no hay,
bájate un poco, contempla
esto que soy, este zapato roto,
esta angustia, este estómago vacío,
esta ciudad sin pan para mis dientes, la fiebre
cavándome la carne,
este dormir así,
bajo la lluvia, castigado por el frío, perseguido
te digo que no entiendo, Padre, bájate,
tócame el alma, mírame
el corazón,!
yo no robé, no asesiné, fui niño
y en cambio me golpean y golpean,
te digo que no entiendo, Padre, bájate,
si estás, que busco
resignación en mí y no tengo y voy
a agarrarme la rabia y a afilarla
para pegar y voy
a gritar a sangre en cuello

MARIO BENEDETTI

Hombre que mira al tira que lo sigue

Well, old spy
look like I
led you down some pretty
blind alleys.
Ray Durem

Señor molusco caballero lapa
ya sabés en qué malos pasos ando
conocés mis esquinas y mis fobias
mis bares mis amores mi bufanda

conocés las puteadas que rezo despacito
cuando pasan los verdes apuntando
conocés cómo escupo al cielo ajeno
cuando me hace sombra el helicóptero

conocés bien a qué mujeres miro
y vos también mirás degenerado
es el único acuerdo entre nosotros
y dura lo que un lirio o una ráfaga

conocés qué porfiada dulzura me atraganta
cuando caen los mejores los más tiernos
los que podrían levantar de a poco
la feroz inocencia que nos salve

conocés que conozco que hay algunos
que cayeron por vos hijo de puta
quiero decir molusco pobre lapa
ya ves que andás en pasos mucho peores

conocés a qué juego y a qué apuesto
sabés que apuesto a que desaparezcas
no el fulano que sos si no el mohoso
herrumbrado tornillo de cadalso

me seguís por mis calles por mis tangos
por mis lluvias y mis noches de arena
vigilás mis gaviotas y mi cédula
mi casilla postal y mi resfrío

conocés mis abrazos y mis postres
mi bigote mi vino mi teléfono
mi libretita con las direcciones
mi mujer mi paraguas mis bolsillos

es decir que sabés todo de afuera
todo de superficie de exteriores
delatarás mi sobra y mi pellejo
y eso no alcanza para hacer la ficha

donde no podés ver donde no llegan
tus antenas en la aurícula izquierda
tengo mi berretín inexpugnable
a pruebas de derrotas y de olvido

allí el destino o no sé quién carajos
armó el amor y almacenó los odios
pero es ahí donde perdés la pista
es ahí donde vamos a joderte

señor molusco caballero lapa.

MARIO BENEDETTI

Hombre preso que mira a su hijo

Cuando era como vos me enseñaron los viejos
y también las maestras bondadosas y miopes
que libertad o muerte era una redundancia
a quien se le ocurría en un país
donde los presidentes andaban sin capangas.

Que la patria o la tumba era otro pleonasmo
ya que la patria funcionaba bien
en las canchas y en los pastoreos.

Realmente no sabían un corno
pobrecitos creían que libertad
era tan solo una palabra aguda
que muerte era tan solo grave o llana
y cárceles por suerte una palabra esdrújula.

Olvidaban poner el acento en el hombre.

La culpa no era exactamente de ellos
sino de otros más duros y siniestros
y estos sí
cómo nos ensartaron
en la limpia república verbal
cómo idealizaron
la vidurria de vacas y estancieros
y cómo nos vendieron un ejército
que tomaba su mate en los cuarteles.

Uno no siempre hace lo que quiere
uno no siempre puede
por eso estoy aquí
mirándote y echándote
de menos.

Por eso es que no puedo despeinarte el jopo
ni ayudarte con la tabla del nueve
ni acribillarte a pelotazos.

Vos ya sabés que tuve que elegir otros juegos
y que los jugué en serio.

Y jugué por ejemplo a los ladrones
y los ladrones eran policías.

Y jugué por ejemplo a la escondida
y si te descubrían te mataban
y jugué a la mancha
y era de sangre.

Botija aunque tengas pocos años
creo que hay que decirte la verdad
para que no la olvides.

Por eso no te oculto que me dieron picana
que casi me revientan los riñones
todas estas llagas, hinchazones y heridas
que tus ojos redondos
miran hipnotizados
son durísimos golpes
son botas en la cara
demasiado dolor para que te lo oculte
demasiado suplicio para que se me borre.

Pero también es bueno que conozcas
que tu viejo calló
o puteó como un loco
que es una linda forma de callar.

Que tu viejo olvidó todos los números
(por eso no podría ayudarte en las tablas)
y por lo tanto todos los teléfonos.

Y las calles y el color de los ojos
y los cabellos y las cicatrices
y en qué esquina
en qué bar
qué parada
qué casa.

Y acordarse de vos
de tu carita
lo ayudaba a callar.

Una cosa es morirse de dolor
y otra cosa es morirse de vergüenza.

Por eso ahora
me podés preguntar
y sobre todo
puedo yo responder.

Uno no siempre hace lo que quiere
pero tiene el derecho de no hacer
lo que no quiere.

Llora nomás botija
son macanas
que los hombres no lloran
aquí lloramos todos.

Gritamos, berreamos, moqueamos, chillamos, maldecimos
porque es mejor llorar que traicionar
porque es mejor llorar que traicionarse.

Llorá
pero no olvides.

sábado, 21 de marzo de 2015

RAMÓN LÓPEZ VELARDE

Alma en pena

A fuerza de quererte
me he convertido, Amor, en alma en pena.

¿Por qué, Fuensanta mía,
si mi pasión de ayer está ya muerta
y en tu rostro se anuncia los estragos
de la vejez temida que se acerca,
tu boca es una invitación al beso
como lo fue en lejanas primaveras?

Es que mi desencanto nada puede
contra mi condición de ánima en pena
si a pesar de tus párpados exangües
y las blancuras de tu faz anémica,
aún se tiñen tus labios
con el color sangriento de las fresas.

A fuerza de quererte
me he convertido, Amor, en alma en pena,
y con el candor angélico de tu alma
seré una sombra eterna.

DULCE MARÍA LOYNAZ

Balada de amor tardío

Amor que llegas tarde,
tráeme al menos la paz:
Amor de atardecer, ¿por qué extraviado
camino llegas a mi soledad?

Amor que me has buscado sin buscarte,
no sé qué vale más:
la palabra que vas a decirme
o la que yo no digo ya...

Amor... ¿No sientes frío? Soy la luna:
Tengo la muerte blanca y la verdad
lejana... —No me des tus rosas frescas;
soy grave para rosas. Dame el mar...

Amor que llegas tarde, no me viste
ayer cuando cantaba en el trigal...
Amor de mi silencio y mi cansancio,
hoy no me hagas llorar.

viernes, 20 de marzo de 2015

KATARINA FROSTENSON

"Posición"

Miren, ahí yace ella, la gran muerta, en el pálido
brillo claro de un prado cenagoso muy cerca
de un juncar. Volteada, y brillando en el fango. Su
cadáver, por él caminan hormigas melancólicamente
en la luz, lo rubio encrespado, y atormentan la carne
abiertamente. Mira en lo hondo, deslumbrante es la hendidura.
Sobre su cadáver en el que tantos pensamientos jugaron,
tejidos se tensaron y frentes descansaron. Anaranjado
gris mate de la hierba. Es una parte del mundo elevada
a la fuerza con la frente contra la tierra, con la carne estriada
por las rejas pálidas de los juncos.

La frente de él cae sobre el cuerpo de ella
hundiéndose en su carne. En el fango de lo rubio silencioso.
Nunca. Nunca, aunque casi entumecido, él piensa: quizá
soy yo el que vive sepultado ahí abajo. Lo que él ve y experimenta
en su pierna: por encima de mi cadáver soy yo el que
yace allá fuera.

20 DE MARZO NACE SALOMÓN DE LA SELVA

20 DE MARZO NACE
SALOMÓN DE LA SELVA

Salomón de la Selva
(León, 1893 - París, 1959) Poeta nicaragüense que escribió en inglés y español. Ensayista, diplomático y político, su obra influyó decisivamente en la evolución de la poesía de su país.
Formado en los Estados Unidos, publicó en 1918 un primer poemario en inglés y frecuentó los círculos literarios neoyorquinos. Peleó en los últimos días de la Primera Guerra Mundial, experiencia que vertería en los versos de El soldado desconocido (1922). Vivió luego en Nicaragua, donde desarrolló actividades sindicales y manifestó su apoyo al líder revolucionario Augusto César Sandino. En 1935 se estableció en México.
Cronológicamente fue el primer poeta vanguardista de Centroamérica; no obstante, en su patria se le ubica simplemente como precursor del llamado Movimiento de Vanguardia. Su obra se divide en dos grandes períodos, que suponen dos poéticas distintas: una experimental, vitalista, y otra serena, reflexiva y clásica, que aborda temas grecolatinos e indígenas. Esta aparente contradicción, sin embargo, no hace más que ratificar su índole de poeta moderno, abierto a los cambios determinados por la experiencia.
Entre sus obras merecen destacarse Tropical town and other poems (1918), El soldado desconocido (1922), Evocación de Horacio (1949), Evocación de Píndaro (1957) y Versos y versiones nobles y sentimentales (1964), entre otros títulos.

ROBERTO ARLT AGUAFUERTES PORTEÑAS YO NO TENGO LA CULPA

     ROBERTO ARLT        AGUAFUERTES PORTEÑAS     YO NO TENGO LA CULPA   Yo siempre que me ocupo de cartas de lectores, suelo admitir que se...