viernes, 6 de marzo de 2015

6 DE MARZO DE 1619 NACE CYRANO DE BERGERAC

6 DE MARZO DE 1619 NACE
CYRANO DE BERGERAC
(Hector Savinien Cyrano de Bergerac, París, 1619-id., 1655) Escritor francés. Se dedicó a la carrera militar hasta que una herida sufrida en el sitio de Arrás (1641) le obligó a renunciar a ella. Regresó a París, donde frecuentó los círculos libertinos y llevó una vida disipada, a la que no siempre podía hacer frente económicamente, y acabó buscando la protección del duque de Arpajon, quien le retiró su confianza tras el estreno de su primera pieza teatral, La muerte de Agripina (1653), motivo de escándalo por su intención antirreligiosa. Su obra más reconocida y ambiciosa es Historia cómica de los estados e imperios de la Luna (1657), seguida en 1662 por Historia cómica de los estados e imperios del Sol, una especie de utopía fantasiosa donde expuso sus concepciones filosóficas, astronómicas y físicas. Edmond Rostand recrearía su figura como la de un personaje romántico y aventurero en su tragicomedia Cyrano de Bergerac (1897).
Hijo de una familia que recientemente había alcanzado la nobleza togada de la capital (no era gascón, como lo presenta Rostand en el drama homónimo), estudió en el Colegio de Beauvais, a cuyo "principal", Jean Graugier, caricaturizó en El pedante engañado, una comedia inspirada en Lope de Vega que destaca por la fresca vena de comicidad que la impregna, si bien tiene demasiados elementos que no llegan a fundirse en unidad artística. Se alistó como cadete en la Compañía de la Guardia, participó en los sitios de Mouzon y Arras (1641) y recibió en estas acciones una herida de espada en la garganta, después de lo cual dejó las armas y regresó a París.
Allí frecuentó los ambientes libertinos y fue discípulo de Gassendi, junto con el joven Molière. Dilapidados los escasos recursos a causa de su disipada vida, residió por espacio de algún tiempo en casa de M. d'Assoucy y renunció a la absoluta independencia. En 1647 heredó un modesto legado de su padre. Por aquel entonces compuso la citada comedia y las Cartas satíricas (contra Scarron, Montefleury, d'Assoucy, etc.), e imaginó una vasta obra, El otro mundo, especie de nueva utopía (Cyrano conocía los textos de Tomás Moro y Campanella) en la cual presentó, entre extravagantes fantasías, sus audaces ideas físicas y filosóficas. Durante las luchas de la Fronda escribió al principio violentas mazarinades (libelos satíricos contra el cardenal Mazarino), pero luego puso su pluma al servicio del cardenal.
Protegido por el duque de Arpajon, compuso la tragedia La muerte de Agripina, que, representada en el Hôtel de Bourgogne en 1653, escandalizó por su descaro y conoció el fracaso. Enemistado con su protector y maltrecho por haberle caído una viga sobre la cabeza, fue socorrido por su piadosa hermana Catalina, superiora del convento de las Hijas de la Cruz, y acabó sus días en casa de un primo, después de su conversión. Su amigo Le Bret publicó (extrayéndolo del manuscrito de El otro mundo) la Historia cómica de los estados e imperios de la Luna en 1657; más tarde, en 1662, aparecía la Historia cómica de los estados e imperios del Sol. En ambos libros el autor relata un viaje imaginario que incluye tanto aventuras como descripciones de las muy diferentes costumbres de los habitantes de la Luna y el Sol, que se combinan con digresiones filosóficas.
En la Historia cómica de los estados e imperios de la Luna, Cyrano cuenta cómo, volviendo una tarde en compañía de algunos amigos después de una excursión campestre, se entregaron todos a hacer graciosas hipótesis sobre la naturaleza de la Luna. El autor afirma, suscitando la hilaridad de todo el grupo, que la Luna es un mundo, según la opinión de algunos antiguos y de Copérnico y Kepler. De regreso a su casa, encuentra sobre su mesa el libro de Cardano, abierto precisamente en la página en que el filósofo habla de dos viejos que se le presentaron una tarde afirmando ser habitantes de la Luna.
Impresionado por tan extraña coincidencia, Cyrano comienza a pensar en la posibilidad de un viaje lunar y fabrica un aparato muy sencillo consistente en un gran número de vejigas llenas de rocío y atadas alrededor del cuerpo. El sol, con su calor, comienza a atraerlas, como hace con las nubes, y de este modo le arrastra a él mismo hacia las alturas, transportándolo a un mundo que, al pronto, no reconoce y que es precisamente el de la Luna. Los habitantes lo consideran una especie de mono y lo tratan como tal. Finalmente uno de ellos le confiesa que es el demonio de Sócrates, se hace su protector y le defiende de mil maneras contra una parte de la población, que se ha dividido en dos bandos: una favorable y otra hostil a Cyrano. Y es él precisamente quien, levantándolo como un huracán y llevándolo sujeto entre sus brazos, lo vuelve a la Tierra, haciéndole atravesar rápidamente todo el espacio.
La obra, luminosa por sus muchas páginas de fresca e intensa comicidad y por la juvenil audacia de su pensamiento, no siempre es igualmente límpida y armoniosa. Da la impresión de ser el trabajo de un pensamiento en gestación, que aún no ha llegado al completo dominio de sí mismo; de ahí que algunas partes del libro aparecen un tanto confusas, no comparables con la armoniosa perfección de los Viajes de Gulliver de Jonathan Swift y de ciertos cuentos satíricos de Voltaire.
A la muerte de Cyrano, la Historia cómica de los estados e imperios del Sol se hallaba incompleta y con abundantes lagunas, pero fue igualmente publicada en 1662. En el libro, con ayuda de una curiosa máquina aerostática de su invención, Cyrano se eleva hasta el Sol, donde, entre otras maravillas, aprende la feliz vida de las aves en su perfecta ordenación política. Cyrano se encuentra con Tomás Campanella, que le cuenta cómo los filósofos son los únicos de entre los hombres que conservan en el Sol, después de la muerte, el ser y la vida que tuvieron en la tierra. Otros detalles de la obra recuerdan La ciudad del Sol de Campanella.

6 DE MARZO DE 1928 NACE GABRIEL GARCÍA MÁRQUEZ

6 DE MARZO DE 1928 NACE
GABRIEL GARCÍA MÁRQUEZ

(Aracataca, Colombia, 1928 - México D.F., 2014) Novelista colombiano. Afincado desde muy joven en la capital de Colombia, Gabriel García Márquez estudió derecho y periodismo en la universidad Nacional e inició sus primeras colaboraciones periodísticas en el diario El Espectador.
A los veintisiete años publicó su primera novela, La hojarasca, en la que ya apuntaba los rasgos más característicos de su obra de ficción, llena de desbordante fantasía. A partir de esta primera obra, su narrativa entroncó con la tradición literaria hispanoamericana, al tiempo que hallaba en algunos creadores estadounidenses, sobre todo en William Faulkner, nuevas fórmulas expresivas.
Comprometido con los movimientos de izquierda, Gabriel García Márquez siguió de cerca la insurrección guerrillera cubana hasta su triunfo en 1959. Amigo de Fidel Castro, participó por entonces en la fundación de Prensa Latina, la agencia de noticias de Cuba. Tras la publicación de dos nuevos libros de ficción, en 1965 fue galardonado en su país con el Premio Nacional.

Sólo dos años después, y al cabo de no pocas vicisitudes con diversos editores, García Márquez logró que una editorial argentina le publicase la que constituye su obra maestra y una de las novelas más importantes de la literatura universal del siglo XX, Cien años de soledad.
La obra, en la que trabajó más de veinte años, recrea a través de la saga familiar de los Buendía la peripecia histórica de Macondo, pueblo imaginario que es el trasunto de su propio pueblo natal y, al mismo tiempo, de su país y su continente. De perfecta estructura circular, el relato alza un mundo propio, recreación mítica del mundo real de Latinoamérica, de un modo que ha venido a llamarse «realismo mágico» por el encuentro constante de elementos realistas con apariciones y circunstancias fantasiosas. Esta fórmula narrativa entronca con la tradición literaria latinoamericana, iniciada con las crónicas de los conquistadores, plagadas también de leyendas y elementos sobrenaturales originados por el profundo choque entre el mundo conocido y la cultura de los españoles que emigraban y la exuberante y extraña presencia del continente latinoamericano.
Tras una temporada en París, en 1969 se instaló en Barcelona, donde entabló amistad con intelectuales españoles, como Carlos Barral, y sudamericanos, como Vargas Llosa. Su estancia allí fue decisiva para la concreción de lo que se conoció como el boom de la literatura hispanoamericana, del que fue uno de sus mayores representantes.

En 1972 Gabriel García Márquez obtuvo el Premio Internacional de Novela Rómulo Gallegos, y pocos años más tarde regresó a América Latina para residir alternativamente en Cartagena de Indias y Ciudad de México, debido sobre todo a la inestabilidad política de su país.

Su prestigio literario, que en 1982 le valió el Premio Nobel de Literatura, le confirió autoridad para hacer oír su voz sobre la vida política y social colombiana. Su actividad como periodista quedó reflejada en Textos costeños (1981) y Entre cachacos (1983), compendios de artículos publicados en la prensa escrita, y en Noticia de un secuestro, amplio reportaje novelado editado en 1996 que trata de la dramática peripecia de nueve periodistas secuestrados por orden del narcotraficante Pablo Escobar. Relato de un náufrago, reportaje sobre un caso real publicado en forma de novela en 1968, constituye un brillante ejemplo de «nuevo realismo» y reflejó su capacidad para cambiar de registro.
En cine intervino en la redacción de numerosos guiones, a veces adaptaciones de sus propias obras, y desde 1985 compartió, con el cineasta argentino Fernando Birri, la dirección de la Escuela Internacional de Cine de La Habana. Falleció en la ciudad de México en 2014, tras una recaíada en el cáncer linfático que le había sido diagnosticado en 1999.



SU OBRA

La obra novelística de Gabriel García Márquez, que obtuvo el premio Nobel de Literatura en 1982, sobresale por su carácter renovador y su especial fantasía imaginativa. Considerado como el máximo exponente del llamado realismo mágico, que tendría en Cien años de soledad (1967) su obra maestra, el escritor colombiano es autor de una extensa producción de excelente calidad que lo ha convertido en una de las figuras más destacadas de la narrativa mundial. García Márquez es también una figura paradigmática del Boom de la literatura hispanomericana de los años 60, fenómeno en algunos aspectos más editorial que literario y que catapultó merecidamente a la fama a un nutrido grupo de narradores de excelente calidad, que hasta entonces apenas eran conocidos más allá de su ámbito nacional.

Su primeras obras, a pesar de su calidad intrínseca, se han visto a menudo como una preparación a Cien años de soledad: aparece ya en ellas el mundo mítico y algunos de los personajes de Macondo y, en algunos casos, el elemento mágico y sobrenatural. En La hojarasca (1955) encontramos el relato de tres testigos ante el cadáver de un suicida, a través de cuyos monólogos se reconstruye fragmentariamente la historia de un hombre solitario enfrentado a la sociedad. El coronel no tiene quien le escriba, de 1961, es un vigoroso relato de la soledad y miseria de un coronel y su mujer, cuyo hijo ha sido fusilado, en un pueblucho colombiano. Completan esta etapa los cuentos de Los funerales de Mamá Grande, de 1962, y La mala hora (1962), obra que envuelve un símbolo político, el miedo colectivo como origen de la violencia.

Cien años de soledad
En 1967 apareció Cien años de soledad, la novela más leída y admirada de García Márquez, que ha sido calificada por Vargas Llosa como "el Amadís de América". La obra desarrolla la saga de una familia, los Buendía, que fundan una ciudad llamada Macondo en una región que los pantanos y la selva hacen inaccesible para el resto del mundo. Empieza cuando José Arcadio Buendía y su prima hermana Úrsula Iguarán se casan a pesar del tabú y dan origen, en la ciudad por ellos fundada, a una estirpe condenada a cien años de pasiones, revoluciones y soledades, estirpe que reincide en el incesto y que se extingue al fin con un vástago con cola de cerdo.

En Macondo, las relaciones con el mundo exterior son anacrónicas (ciertas innovaciones europeas son introducidas por unos gitanos errabundos), pero accede a ella una compañía bananera que añade, a las calamidades naturales, la explotación y la opresión. Cabe leer sin duda la novela y su mítica Macondo como una alegoría del subdesarrollo y aislamiento de Hispanoamérica; pero es sobre todo una obra de prodigiosa imaginación y humor, que rompe con un concepto limitado de realismo para recuperar en las fuentes orales del mito y la leyenda sus motivos de inspiración. La novela rebosa de elementos mágicos y sorprendentes como la subida al cielo de Remedios la bella, el hallazgo de un galeón a diez kilómetros del mar, la lluvia de pájaros muertos sobre el pueblo. José Arcadio, por ejemplo, trata de fotografiar a Dios y más adelante muere atado a un árbol delirando en latín.

Todos los hombres de la familia Buendía están resueltamente solos, rodeados por otros hombres de guerra o por mujeres que equilibran con sus corduras (o sus locuras) los excesos del mundo cotidiano. El destino de todos los habitantes de Macondo es el aislamiento. Y llegará el día en que el primero de los Aurelianos (hay un Aureliano por generación: la repetición de los nombres, como la de los sucesos a lo largo de sus veinte capítulos no numerados, contribuyen a la sensación de que la vida es un fenómeno circular), dé instrucciones estrictas para que nadie, incluyendo a su mujer, pueda acercarse a él más de diez pies. "De Cien años de soledad se han escrito toneladas de papeles -dijo García Márquez-, pero nadie ha tocado el punto que a mí más me interesaba al escribir el libro, que es la idea de que la soledad es lo contrario de la solidaridad y que yo creo que es la esencia del libro."

Nuevas obras maestras

En 1970 se editó en libro el Relato de un náufrago, una crónica periodística que ya había sido publicada por entregas en El Espectador (1955). La veta fantástica reaparece en los siete cuentos (todos ellos brillantes) recogidos en el volumen La increíble y triste historia de la cándida Erendira y de su abuela desalmada (1972). El otoño del patriarca, de 1975, otra de sus novelas más celebradas, aborda el tema de la dictadura y trata sobre las calamidades y la irremediable soledad del poder encarnado en una figura anónima y mítica.

Posteriormente publicó Crónica de una muerte anunciada (1981), basada en un suceso ocurrido durante la niñez del escritor (una muerte, ya conocida al comienzo de la novela, para vengar una deshonra), y El amor en los tiempos del cólera, de 1986, historia de amor que transcurre en un pueblecito portuario del Caribe. Cabe mencionar además la recopilación en cuatro tomos de su Obra periodística (1982) y la crónica política La aventura de Miguel Littin (1986).

Tras estrenar el año 1988 en Buenos Aires el monólogo teatral Diatriba de amor contra un hombre sentado, publicó El general en su laberinto (1989), novela acerca del último viaje de Simón Bolívar desde Bogotá hasta Santa Marta, que suscitó un animado debate entre estudiosos colombianos y venezolanos sobre la fidelidad histórica de su contenido. En 1992 apareció la colección de relatos Doce cuentos peregrinos. Dos años más tarde, veía la luz la novela Del amor y otros demonios, y ya en 1996 publicó Noticia de un secuestro, una novela-reportaje. En la primera parte de sus memorias, tituladas Vivir para contarla (2002), rememoró en forma novelada sus primeros treinta años de vida. En el año 2004 se publicó la que sería su última novela, Memorias de mis putas tristes, historia de amor entre un anciano periodista y una jovencísima prostituta.

ROBERTO ARLT AGUAFUERTES PORTEÑAS YO NO TENGO LA CULPA

     ROBERTO ARLT        AGUAFUERTES PORTEÑAS     YO NO TENGO LA CULPA   Yo siempre que me ocupo de cartas de lectores, suelo admitir que se...