22 DE JULIO DE 1990 MUERE
MANUEL PUIG
(General Villegas, 1932 - Cuernavaca, 1990)
Novelista argentino que a través de su afición por el cine y el uso
paródico del habla coloquial creó una singular obra literaria. Fascinado
por el séptimo arte, su industria y sus estrellas preferidas (Greta Garbo, Marlene Dietrich y Rita Hayworth),
se vinculó en Buenos Aires a las vanguardias artísticas; marchó a
Italia a estudiar cine y luego a Nueva York, donde amplió sus
conocimientos.
Su infancia transcurrió en el aislamiento de la
pampa bonaerense. En 1951, una beca le permitió estudiar cinematografía
en Roma (asistió a unos cursos de Cesare Zavattini)
y trabajó luego en varios films como ayudante de dirección. La
influencia del cine sobre su narrativa no es sólo de orden técnico, sino
también social y ambiguamente temático, y configura su mensaje en la
medida en que, al igual que el serial radiofónico, sirve al autor como
marco y modelo que encuadran sentimentalmente la cursilería de la
pequeña clase media. Dos rasgos merecen añadirse: el original enfoque
del autor, que es implacablemente objetivo y de un humor ambiguo, y su
predilección por personajes femeninos.
La propia actriz consintió en que utilizase su nombre en la novela La traición de Rita Hayworth
(1968), que relata la iniciación amorosa de un adolescente a través de
escenas de comedia rosa de Hollywood. Se trata de una evocación de su
infancia pueblerina que resultó finalista en España del premio
Biblioteca Breve. El periódico francés Le Monde la proclamó una
de las mejores novelas del bienio 1968-1969. La estructura de la obra se
basa en la superposición de distintos recursos que ponen de manifiesto
las fantasías y alienaciones de los personajes.
Manuel Puig regresó a Buenos Aires, donde publicó Boquitas pintadas
(1969), de la que afirmó era un folletín con el cual, sin renunciar a
los experimentos estilísticos iniciados en su primera novela, intentaba
una nueva forma de literatura popular; esta obra resultó, igualmente, un
éxito de público, pero dividió la opinión de los críticos. Su tercera
novela, The Buenos Aires Affair (1973) encuentra su marco
apropiado en el género policial pero, a su vez, cada capítulo se halla
precedido por una cita cinematográfica. Fue secuestrada en Argentina y
obligó a Puig a exiliarse, primero en Brasil y después en México.
En El beso de la mujer araña, que fue llevada
al cine y adaptada al teatro, abordó los temas del compromiso político y
la homosexualidad. La obra transcurre en la cárcel, donde un homosexual
refiere casi sin cesar a un preso político argumentos de películas
clásicas con cuyas heroínas se identifica plenamente. A continuación
publicó Pubis angelical (1979), que relata dos historias
paralelas: una imaginaria, situada en los años treinta primero en Europa
y luego en Hollywood, y real la segunda, protagonizada por una mujer
enferma en una clínica.
Le siguieron Maldición eterna a quien lea estas páginas (1980), Sangre de amor correspondido (1982) y Cae la noche tropical (1988), una pieza teatral (Bajo un manto de estrellas, 1983) y dos guiones cinematográficos, La cara del villano y Recuerdo de Tijuana (ambos de 1985). Murió por falta de atención médica adecuada y dejó inconclusa su novela Humedad relativa: 95%. Su obra es uno de los experimentos mejor logrados de acercar la cultura popular a la literatura.