miércoles, 10 de enero de 2018

10 DE ENERO DE 2011 MUERE :

MARÍA ELENA WALSH
(Buenos Aires, 1930) Poeta y compositora argentina que renovó el modo de abordar la literatura infantil en lengua castellana y cambió sus parámetros, despojándola de un propósito didáctico.
A partir de 1945 publicó poemas y notas en las revistas El Hogar, Sur y en los diarios La Nación, Clarín y La Razón. En 1948 egresó de la Escuela Nacional de Bellas Artes y fue invitada a Estados Unidos por el poeta español Juan Ramón Jiménez. Entre 1952 y 1956 residió en París, donde compuso canciones infantiles y folclóricas. Ya en Argentina realizó programas de televisión para niños y adultos, recorrió el norte del país cantando con Leda Valladares y estrenó espectáculos teatrales para niños.

María Elena Walsh
Poetisa precoz, con sólo diecisiete años publicó su primer libro de poemas, Otoño imperdonable, marcado por las tendencias dominantes de la generación del cuarenta. En sus libros posteriores (Baladas con Ángel, 1952; Hecho a mano, 1965), Walsh mantuvo las características formales de su primer libro, tales como los versos medidos y las estrofas rimadas, pero fue virando la temática, confesional e intimista, hacia una más atenta al lenguaje coloquial y la realidad externa, tal como se pone de manifiesto en poemas como "Carta de recomendación", "Solicitud de empleo", "Rechazando una invitación a ir al cine o participar en cualquier otra actividad mundana" o "Eva".
Luego de una recordada experiencia televisiva a finales de la década de 1950, en la que dio a conocer sus personajes Doña Disparate y Bambuco, estrenaría en Buenos Aires el espectáculo para chicos Canciones para mirar, compuesto por una serie de canciones, poemas y cuentos breves que luego fue publicando tanto en libros -Tutú Marambá (1960), El reino del revés (1965), Zoo loco (1965), Dailan Kifki (1966), Cuentopos del Gulubú (1966) y Versos tradicionales para cebollitas(1967)- como en discos: Canciones para mirar (1963), Canciones para mí (1963), En el país de Nomeacuerdo (1967), Juguemos en el mundo (1968) y Cuentopos(1968), entre otros. La pintora Norah Borges, hermana del afamado escritor Jorge Luis Borges, ilustró alguno de sus libros.
La obra para chicos de Walsh, basada en las nursery rhymes inglesas, pero también en las coplas españolas, en la utilización de la rima como juego y en el disparate conceptual, se encuentra en la base de la formación intelectual, cultural y afectiva de por lo menos cuatro generaciones de argentinos. Sin duda, buena parte del enorme prestigio intelectual y moral que ha llegado a tener María Elena Walsh debe su origen a esta magnífica obra para chicos, que pertenece ya a la categoría de clásico indiscutible de la cultura argentina.
María Elena Walsh es también autora de un libro de memorias, Novios de antaño, de la recopilación de artículos País jardín de infantes (1990) y del libro de lectura Aire libre (1967). Ha sido galardonada y homenajeada en reiteradas ocasiones y en distintos ámbitos: obtuvo el Gran Premio de Honor de la Sociedad Argentina de Autores y Compositores (SADAIC) y el Premio del Fondo Nacional de las Artes. Es doctora honoris causa por la Universidad Nacional de Córdoba y Ciudadana Ilustre de la Ciudad de Buenos Aires; la embajada de Polonia la condecoró con la Orden de la Sonrisa.

10 DE ENERO DE 1883 NACE :

ALEXÉI NIKOLÁIEVICH TOLSTÓI
(Alexéi, Alekséi o Aleksey Nikoláievich Tolstoy o Tolstói; Nikoláievsk, 1883 - Moscú, 1945) Escritor soviético. Es uno de los pioneros de la ciencia ficción soviética. Empezó su carrera literaria publicando poemas (Más allá de las flores, 1907), novelas cortas (Los cuentos de la urraca, 1912) y narraciones costumbristas (El señor cojo, 1912; Los barrancos).

Alexéi Tolstói
En 1917, a raíz de la Revolución, marchó a París y, posteriormente, a Berlín. De esta época son las novelas La infancia de Nikita (1922) y Las hermanas (1922). En 1923 regresó a Rusia, donde publicó El año 1918 (1927-1928) y Mañana sombrío(1940-1941), que, junto con Las hermanas, forman una trilogía titulada El camino de los tormentos, que constituye un análisis del papel de los intelectuales ante la revolución.
Entre sus relatos fantásticos destacan Aelita (1923) y El hiperboloide del ingeniero Garin (1925). Es autor, además, de las novelas históricas Pedro I (1929-1945), en tres volúmenes, e Iván el Terrible (1943).

10 DE ENERO DE 1880 NACE: MANUEL AZAÑA

10 DE ENERO DE 1880 NACE:

MANUEL AZAÑA
(Manuel Azaña Díaz; Alcalá de Henares, Madrid, 1880 - Montauban, Francia, 1940) Político español, presidente de la Segunda República. Procedente de una familia liberal, Azaña estudió derecho en Zaragoza y Madrid, doctorándose con una tesis sobre La responsabilidad de las multitudes; entró por oposición en la función pública (1910); y completó su formación con una beca de la Junta para Ampliación de Estudios en París en 1911-12. Su actividad intelectual le llevó a la secretaría del Ateneo de Madrid, puesto que ocupó entre 1913 y 1920; su interés por los asuntos militares se inició al ser comisionado por el Ateneo para visitar los frentes de la Primera Guerra Mundial en Francia e Italia (1916).

En 1913 ingresó en el Partido Reformista de Melquiades Álvarez y participó con Ortega y Gasset en la fundación de la Liga de Educación Política; en 1918 fundó la Unión Democrática Española; pero fracasó en sucesivos intentos de ser elegido diputado en las Cortes de la Restauración (1918 y 1923). Se apartó temporalmente de la política para dedicarse al periodismo, primero como corresponsal en París (1919-20), luego al frente de La Pluma (1920-23) y finalmente como director de la revista España.
Bajo la dictadura de Miguel Primo de Rivera abandonó el Partido Reformista y se declaró partidario de la República, fundando Acción Republicana (1925); al mismo tiempo crecía su prestigio intelectual, con la publicación de obras como El jardín de los frailes o Ensayos sobre Valera. En 1930 accedió a la presidencia del Ateneo y, ya como figura de alcance nacional, participó en el Pacto de San Sebastián para derrocar a la monarquía.
Al proclamarse la República española (14 de abril de 1931), Azaña se integró en el gobierno provisional como ministro de la Guerra. Participó activamente en las Cortes constituyentes. Y asumió la Presidencia del Consejo de Ministros cuando las discrepancias sobre las relaciones Iglesia-Estado llevaron a Niceto Alcalá Zamora a abandonar el gabinete.
Como jefe de un gobierno formado por socialistas y republicanos de izquierdas (1931-33), Manuel Azaña impulsó un amplio programa de reformas: secularizó la vida pública (legalizando el matrimonio civil y el divorcio), reformó el ejército, puso en marcha una reforma agraria y concedió la autonomía a Cataluña. Todo ello le enfrentó con las fuerzas conservadoras, pero no fue suficiente para asegurarle el apoyo del movimiento obrero, en un momento en que la depresión económica mundial agudizaba las dificultades. Desprestigiado por la represión armada de un levantamiento campesino en Casas Viejas (Cádiz), hubo de dimitir y perdió las elecciones de 1933, que dieron el gobierno a la derecha.
En 1934 fusionó su partido con los radicales de Marcelino Domingo, formando Izquierda Republicana (1934), partido con el cual realizó una efectiva campaña de oposición al gobierno. La ascensión de José María Gil Robles al poder, interpretada como el triunfo del fascismo en España, le llevó a participar primero en la fracasada Revolución de Octubre de 1934 (por lo que pasó algún tiempo en prisión) y a integrarse después en un Frente Popular con todas las fuerzas de izquierdas.
El triunfo de dicha formación en las elecciones de febrero de 1936 devolvió a Manuel Azaña a la jefatura del gobierno y le promovió después a la Presidencia de la República (mayo). Enseguida retomó el programa reformista del primer bienio republicano, pero apenas tuvo tiempo de desarrollarlo a causa del golpe de Estado que, a partir de julio, dio paso a la Guerra Civil (1936-39).
Azaña se fue quedando progresivamente aislado, sin capacidad para mantener la unidad y el orden en el bando republicano, ante el radicalismo y los conflictos internos de las organizaciones obreras. Refugiado en su papel de intelectual, se permitió reflexionar sobre la guerra en La velada en Benicarló (1937); y defendió la conveniencia de acelerar un final negociado de la contienda, ante la perspectiva inexorable de la derrota (lo cual le enfrentó con Juan Negrín). Perdida la guerra, se exilió en Francia y renunció a la presidencia (1939).

ROBERTO ARLT AGUAFUERTES PORTEÑAS YO NO TENGO LA CULPA

     ROBERTO ARLT        AGUAFUERTES PORTEÑAS     YO NO TENGO LA CULPA   Yo siempre que me ocupo de cartas de lectores, suelo admitir que se...