viernes, 10 de mayo de 2013


Primeros días 
(1899 -1913)
Nace a los ocho meses de gestación, el 24 de agosto de 1899, en la calle Tucumán 840, en una típica casa de la época con patio y aljibe, dos elementos que se repetirán como un eco en sus poesías. Pero su infancia transcurrió al norte de su casa natal, en la calle Serrano 2135 del barrio de Palermo. A los cuatro años ya sabía leer y escribir. En 1905 comienza sus primeras lecciones con la institutriz británica Miss Tink. Al año siguiente escribe su primer relato, La visera fatal, siguiendo páginas del Quijote, y también, esboza en inglés un breve ensayo sobre mitología griega. En 1908 traduce del inglés El príncipe feliz, de Oscar Wilde, al que firma Jorge Borges (h) y que se publica en el periódico El País. En Palermo conoce las andanzas de los compadritos que después poblaron sus ficciones. En esa época, Palermo era un barrio marginal de inmigrantes y cuchilleros. Borges ingresa en la primaria en cuarto grado, donde soporta las burlas de sus compañeros debido a sus lentes y el cuello y la corbata estilo Eton con que lo envíaban a clase. Por esta época la familia pasa sus vacaciones de verano en Adrogué o en casa de unos familiares uruguayos, los Haedo.

Europa (1914 - 1920)
En 1914 su padre, por problemas de la vista, se jubila como profesor y, junto con la familia, marcha a Europa para un tratamiento oftalmológico especial. Para refugiarse de la Primera Guerra Mundial se establecen en Ginebra, donde el joven Borges estudia francés y cursa el bachillerato en el Lycée Jean Clavin. Lee preferente a los prosistas del realismo francés y a los poetas del expresionismo y del simbolismo, especialmente a Rimbaud. A la vez, descubre a Schopenhauer, a Nietzsche, a Carlyle y a Chesterton. Solo con un diccionario "se enseña" alemán y escribe sus primeros versos en francés. En 1919, gracias al fin de las hostilidades y después del fallecimiento de la abuela materna, Borges marcha a España. En Palma de Mallorca escribe dos libros que no publica: Los ritmos rojos, poemas de elogio a la Revolución Rusa, y Los naipes del tahúr, un libro de cuentos. En Madrid y en Sevilla participa del movimiento literario ultraísta que luego encabezaría en Argentina. Colabora con poemas y la crítica literaria en las revistas Ultra, Grecia, Cervantes, Hélices y Cosmópolis. Publica su primer poema conocido, Al mar. Conoce a su futuro cuñado, Guillermo de Torre, y a los principales escritores españoles de la época: Rafael Cansinos-Assens (a quien frecuentaba en el famoso Café Colonial y a quien consideró su maestro), a Ramón Gómez de la Serna, a Valle Inclán y a Gerardo Diego.

Vuelta al país (1921 - 1923)
En 1921 regresa con sus padres y su hermana Norah a Argentina. El contacto con Buenos Aires lleva al poeta a una relación exaltada, de "descubrimiento" con su ciudad natal y de los suburbios porteños. Así, comienza a dar forma, en sus primeros libros de poesía, a la mitificación de los barrios suburbanos, donde asentará parte de su constante idealización de lo real. Convoca a un grupo de amigos con su misma inclinación vanguardista: el primo Guillermo Juan, Eduardo Gonzáles Lanuza, Norah Lange y Francisco Piñero. Brocha en mano, estampan de noche por las calles céntricas la renovadora palabra ultraísmo. Borges empieza a colaborar en numerosas revistas literarias y periódicos. También, conoce al escritor, filósofo de la paradoja y humorista surreal Macedonio Fernández, a quien sigue con devoción juvenil en la tertulia que éste dirige. Publica en la revista Nosotros un manifiesto ultraísta. Funda, junto con otros escritores, la revista Prisma. En 1922 funda la segunda época de la revista Proa, con Macedonio Fernández y sus otros amigos, abandona paulatinamente esta estética. Sólo salen 3 números de esta revista pero allí se consolida su admiración por Macedonio, el cual lo atraía con su pausada e inteligente conversación, su humor metafísico y sus convicciones idealistas. A los 24 años, Borges edita su primer libro: Fervor de Buenos Aires. 

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